Persépolis es uno de los mayores sitios arqueológicos del mundo conocido como la joya de Conjuntos aqueménidas en los campos de la arquitectura, la tecnología de la construcción, el urbanismo y el arte.

Viajar a lugares míticos siempre es emocionante y más si eres aficionado a la historia, Persépolis es un monumento que te emociona mucho. Será difícil encontrar un lugar como este donde pueda presenciar los restos de una civilización antigua prominente.

En este artículo te contamos toda la información esencial que debes saber para visitar Persépolis, un importante monumento que debes incluir en cualquier recorrido por Irán.

Lees estos temas respectivamente:

• ¿Vale la pena visitar Persépolis?
• El horario de apertura de Persépolis
• ¿Cómo llegar a Persépolis?
• ¿Cuánto tiempo necesito para visitar Persépolis?
• ¿Cuál es la mejor época para visitar Persépolis?
• ¿Qué debo saber para visitar Persépolis?
• ¿Cuánto cuestan las tarifas de entrada a Persépolis?
• Breve historia de Persépolis
• ¿Por qué se construyó Persépolis?
• ¿Cuál es el significado de Persépolis?
• ¿Quién destruyó Persépolis?
• Persépolis, Patrimonio de la Humanidad registrado por la UNESCO
• Arquitectura de Persépolis
  • Puerta de todas las naciones
  • Apadana, el salón de audiencias de Persépolis
  • Tachar, Palacio de Darío
  • Hadish, Palacio de Jerjes
  • El Palacio de las Cien Columnas

Persépolis es el monumento más famoso cerca de una de las ciudades más visitadas de Irán, Shiraz. Visitar Persépolis definitivamente vale la pena y no es de extrañar que un gran número de personas lo hagan a diario como una experiencia única en la vida.

La Persépolis actual es el remanente de la conocida Imperio, el aqueménida. Cuando visite esta gran joya, será inevitable que su imaginación esté ocupada todo el tiempo pensando en lo impresionante que debe haber sido este emperador.

Percibirás la magnificencia de Persépolis tan pronto como te encuentres frente a sus imponentes muros, subiendo las elegantes escaleras de entrada simétricas, pasando los gigantescos pilares y mirando los patrones en las paredes. A través de ellos los gobernantes de todo el mundo entraron al palacio para rendir tributo al Rey de Reyes.

Cuando te paras frente a Persépolis y piensas que fue construida en el año 521 a. C., comienzas a considerar que es un milagro que después de tantos siglos las imponentes columnas permanecieran erguidas. Ganando el desafío a la gravedad, los terremotos y el paso del tiempo, esos pilares tienen nada menos que 20 metros.

Persépolis está abierto de 8:00 am a 5:30 pm todos los días excepto 6 definidos días festivos.

4^th de junio es la muerte del líder islámico de Irán, Ashura, Tasua, el martirio del Imam Ali, el martirio del Imam Jafar y el martirio del Profeta Mohamad.

Persépolis se encuentra a unos 70 km de Shiraz. Se tarda una hora más o menos en llegar. La mejor opción para visitar Persépolis es en coche privado o en tours compartidos.

Visitar Persépolis con un guía que explica toda la historia y las partes de la ciudad hace que tu visita cobre vida, así que ve con alguien que te explique qué es más que solo las ruinas.

La mejor opción para llegar a Persépolis es en coche privado o tours compartidos que cuestan 30€ (dos pax) ida y vuelta.

Se sugiere combinar la visita a Persépolis con Naqsh-e Rustam y Pasargadae. Visitar Persépolis junto con Naqsh-e Rustam y Pasargadae cuesta 60€ (dos pax).

Persépolis se encuentra en el camino a Yazd e Isfahan. si estas en tu propio vehículo, es una buena oportunidad para visitar este monumento en ruta.

Contacto para hacer preguntas sobre Persépolis o reservar una guía turístico.

Para ver Persépolis, necesitas medio día. Si desea agregar Necropolis (Naghsh-e Rustam), medio día es suficiente. Pasargadae está a una hora de Persépolis. En el caso de que desee agregarlo, se necesita un día completo.

Puedes visitar Persépolis durante todo el año, sin embargo, cada temporada tiene sus propias condiciones. Te lo explico detalladamente a continuación:

• La primavera, de marzo a finales de mayo es la temporada alta con las mejores temperaturas pero llena de visitantes.
• Julio a agosto son los meses calurosos del verano. Por lo que se sugiere protegerse del sol seleccionando horas de visita tempranas o tardías.
• De septiembre a principios de noviembre también es una temporada perfecta gracias al suave clima otoñal.
• Desde noviembre hasta principios de marzo el clima es frío por lo que las visitas al mediodía serán agradables.

Mejor momento para visitar Persépolis según la hora del día:

• La mañana es el mejor momento para tomarse autofotos.
• El mediodía es el mejor momento teniendo en cuenta la menor cantidad de turistas.
• Y la tarde cuando el sol está del otro lado es un buen momento para tomar fotos del monumento al atardecer.

1. Tenga suficiente agua con usted, especialmente si estará allí en los meses cálidos.
2. Ten en cuenta que no está permitido entrar con mochila o bolso. Si tiene uno, se le pedirá que lo deje en la taquilla.
3. Utilizar crema de protección solar, llevar sombrero o sombrilla y gafas de sol.
4. Lea sobre la historia de la antigua Persia de antemano. Enriquecerá tu visita y podrás hablar con tu guía no solo escuchando información.
5. No olvides tener una cámara contigo.
6. Si eres una mujer sola, lee este artículo sobre mujer viajera sola en Irán.

La entrada a Persépolis cuesta 500,000 IRR.

Si además quieres visitar el museo de Persépolis te costará otras 200,000 IRR.

Según los hallazgos de los equipos de excavación, los primeros restos de Persépolis datan del 515 a. C. (hace casi 2500 años); cuando Ciro el grande eligió su ubicación al pie de Kuh-e Rahmat (Montaña de la Misericordia). Sin embargo, el Terrance fue construido por Darius I y algunos creen que tomó 120 años terminar esta construcción.

Para entender a Persépolis hay que situarla en su marco histórico. Su fundador, el que planeó la construcción de una ciudad que representara el reinado de los aqueménidas, fue Darío I el Grande, el rey de los reyes. Su hijo Jerjes I y su nieto Artajerjes II continuó la construcción en Persépolis agregando más palacios a lo largo de la edad de oro del Imperio Persa.

Parte de un vasto programa de construcciones monumentales enfocadas en enfatizar la unidad y diversidad del Imperio Persa Aqueménida, la legitimidad del poder real y mostrar la grandeza de su reino. Muchos bajorrelieves esculpidos en los escalones y puertas del palacio representan la diversidad de los pueblos que componían el imperio. Las múltiples inscripciones reales en escritura cuneiforme de Persépolis están escritas en persa antiguo, babilónico o elamita. Están registrados en varios lugares del sitio, destinados a los mismos propósitos y especifican qué reyes ordenaron la erección de los edificios.

Numerosas expediciones arqueológicas nos han permitido conocer mejor las estructuras, su aspecto original y las funciones que cumplían.

Herzfeld creía que Persépolis se hizo para ceremonias especiales, sobre todo Nowruz o año nuevo persa que todavía se celebra. Pero para entender por qué se construyó esta ciudad, es necesario retroceder mucho más atrás en el tiempo.

Cuando murió el rey aqueménida Ciro II, su hijo mayor Cambises II lo sucedió. Estaba en la conquista de Egipto, cuando su hermano pequeño, Bardiya, el gobernador de una de las provincias persas que ahora están en el territorio de Afganistán, se levantó contra él. Cambises asesinó a su hermano y él mismo murió por una herida infectada en la pierna.

Siete nobles aqueménidas discutieron el destino del imperio al elegir al nuevo rey. Entre ellos estaba Darío I, unido por lazos familiares a la dinastía aqueménida (Ciro era su tío abuelo). Se reunieron fuera del palacio, montados en sus caballos al amanecer, y el hombre cuyo caballo relinchó primero al reconocer el sol naciente se convertiría en rey. El caballo de Darius fue el primero y fue la señal de que Ahura Mazda, dios del zoroastrismo, el creador del mundo, quería designarlo como el futuro rey de Persia.

En el momento de la muerte de Cambises, el Imperio aqueménida era más fuerte que nunca y se extendía desde Cirenaica hasta el Hindu Kush y desde Syr Darya hasta el Golfo Pérsico. Para transmitir su poder a todas las naciones del vasto territorio, Darius necesitaba una capital impresionante. Así fue como se construyó Parsa, la ciudad de los persas, para transmitir el poder del imperio aqueménida a sus naciones súbditas que presentaban presentes al rey allí. Muchos bajorrelieves esculpidos en los escalones y puertas del palacio representan la diversidad de los pueblos que componían el imperio.

La ciudad, además de ser un centro político y administrativo, era el lugar donde los sátrapas (los representantes de las provincias del imperio) acudían a entregar sus tributos en las ceremonias del Año Nuevo persa, Nowruz. La gran Apadana de Persépolis podía acoger hasta 10,000 invitados.

Persépolis, que significa ciudad persa, es la versión latinizada del antiguo nombre persa "Parsa".

Este nombre, Parsa, se conoce porque apareció en las tablillas de arcilla encontradas allí y significa literalmente la "ciudad de los persas".

Persépolis también se conoce como Thakht-e Jamshid (trono de Jamshid). Jamshid fue el primer gobernante, probablemente mítico, de Irán.

Artajerjes III, fue el último rey aqueménida, luego llegó un macedonio con sed de venganza, Alexander. Las llamas de la venganza y la envidia de Alejandro en el 330 aC destruyeron Persépolis.

Hay algunas teorías que explican por qué tomó tal decisión; tampoco fue su venganza personal ya que en la segunda guerra Jerjes mandó incendiar Atenas. Otra teoría dice que después de que Alejandro conquistó Persépolis, hizo una gran fiesta y como estaba completamente borracho, no dudó en tirar fuego por todas partes.

No importa qué motivó a Alejandro a prenderle fuego, pero aquí terminaron los días de gloria de esta imponente ciudad. Persépolis quedó sepultada en el olvido del tiempo hasta 1931, cuando las misiones arqueológicas comenzaron a desenterrar las ruinas del antiguo imperio.

Su última gloria fue en 1971 cuando otro emperador, Shah Pahlavi, conmemoró los 2,500 años de la fundación del emperador persa. A la ceremonia asistieron representantes de la nobleza, gobernantes y líderes políticos de casi todo el mundo.

Independientemente de los que han gobernado Irán, hay algo en Persépolis que se ha mantenido hasta la fecha, el Año nuevo persa. Los iraníes siguen yendo a Persépolis para celebrar Nowruz como en la época de los reyes aqueménidas.

UNESCO ha clasificado el complejo arqueológico de Persépolis como Patrimonio de la Humanidad desde 1979 por tres criterios:

Criterio (i): La terraza de Persépolis es una creación arquitectónica grandiosa.

Criterio (iii): Este conjunto está clasificado entre los sitios arqueológicos más grandes del mundo sin una calidad equivalente y única a una civilización más antigua.

Criterio (vi): La terraza de Persépolis sigue siendo la imagen de la propia monarquía aqueménida.

Hay un hecho diferencial en la construcción de Persépolis con respecto a las ciudades romanas y griegas contemporáneas. Persépolis fue construida por trabajadores asalariados de la satrapías del Imperio Persa a diferencia de las ciudades romanas y griegas que fueron construidas por esclavos.

Visite el monumento de Persépolis reconocido por la UNESCO, así como otros monumentos del patrimonio mundial en Irán participando en Tour del Patrimonio Mundial de Irán. Nuestros guías turísticos profesionales te acompañan en tu aventura por la antigua Persia.

• Puerta de todas las Naciones

La puerta de todas las naciones pues la entrada no puede ser más escenográfica. Imagínese el impacto que tuvo en los visitantes en los días de gloria de Persépolis. Consistía en un gran salón y una entrada en el Muro Occidental. Había dos puertas más, una al sur que se abría al patio de Apadana y la otra se abría a un largo camino hacia el este.

Para reflejar el poder del imperio, gigantescas figuras de más de cinco metros de altura recibían al visitante de Persépolis. Un par de lamaso, toros con cabezas de hombres barbudos, se paran en el umbral occidental. El lamaso es un genio celestial alado de la antigua Mesopotamia. Su misión era ahuyentar a los malos espíritus y demonios que querían entrar en la ciudad.

El nombre de Jerjes I fue tallado en tres idiomas: el elamita, persa y babilónico informando que fue construido en su orden. Una de las frases dice:

“Yo soy Jerjes, el gran rey, rey de reyes, el rey de los pueblos de origen numeroso, el rey de esta gran tierra, el hijo del rey Darío, el aqueménida”.

• Apadana, la Sala de Audiencias de Darío

Apadana fue el edificio más grande de la Terraza de Persépolis y fue excavado por el arqueólogo alemán Ernst Herzfeld. Probablemente era el salón principal de los reyes donde recibían el tributo de todas las naciones y daban regalos a cambio.

Setenta y dos columnas de 20 m de altura coronadas por gigantescos capiteles en forma de toros o leones sostienen el techo de Apadana.

Aquí encontrarás la parte más bella y mejor conservada de Persépolis. Una de las visitas obligadas son las escaleras de la Apadana. Las escalinatas monumentales norte y este daban acceso a la sala. Están decorados con relieves que muestran a delegados de las 23 naciones sujetas del Imperio Persa rindiendo tributo a Darío I. La belleza de estos relieves es que son como una fotografía en piedra. Gracias a estos relieves conocemos la vestimenta y el peinado de medos, elamitas, libios, nacimientos, etíopes, arios, armenios, asirios y así hasta 23 naciones.

• Tachar, Palacio de Darío

Táchar Se encuentra de espaldas a la Apadana fue el palacio de Darío el grande. Fue construido con piedra gris de la mejor calidad. Aunque sus paredes de bloques de barro se han desintegrado por completo, los enormes bloques de piedra de los marcos de puertas y ventanas han sobrevivido.

Como muchas otras partes de Persépolis, el Tachar tiene relieves de dignatarios que llevan tributos. Aquí se puede ver un bajorrelieve particular, un león mordiendo a un toro, el paso del invierno a la primavera o el símbolo de Nowruz.

En la portada principal también hay un bajorrelieve que representa a Darío I coronado y adornado con joyas.

• Hadish, el Palacio de Jerjes

El hijo de Darío no quería ser menos, así que construyó un palacio más grande que el de su padre, llamado hachís después del nombre de su esposa. El palacio privado de Jerjes se encuentra en la parte más alta de Persépolis.

El fuego probablemente se inició desde este lugar debido al odio que los atenienses tenían por Jerjes. El color amarillo de las rocas indica que el agua de su interior se ha acabado.

No hay mucha información sobre este palacio y quedó como un lugar misterioso. El único relieve que queda aquí es aquel en el que Jerjes aparece en procesión.

• El Palacio de las Cien Columnas

El segundo palacio de Persépolis es un magnífico monumento en el este del patio de Apadana que se llama el Salón del Trono, el Salón de Honor del Ejército Imperial o el Palacio de las Cien Columnas. Sus portales están decorados con relieves de escenas de tronos y escenas que representan al rey en combate con monstruos.

Según las evidencias encontradas por Herzfeld, la construcción de este importante Salón comenzó por Jerjes I pero se completó por Artajerjes I.